Una reciente investigación informa que los portadores de VIH son mucho más propensos a sufrir enfermedad ósea, en una proporción considerable en comparación con la población general.
El virus de la inmunodeficiencia humana, según los especialistas, da origen a que ocho de cada 10 pacientes tengan osteoporosis, un trastorno que eleva el riesgo de contraer fracturas, u osteopenia, que es la pérdida anormal de masa ósea y que lleva a la transformación en osteoporosis.
No se sabe por qué los portadores de VIH son más propensos a padecer la pérdida ósea, informó la doctora Anna Bonjoch, de la Fundación Lucha contra el Sida, de Barcelona, España.
“Las personas VIH positivo poseen los mismos factores de riesgo que el resto, pero el virus afecta los huesos, al igual que algunos fármacos destinados a tratar la afección”, agregó la experta.
Bonjoch aclaró: los pacientes no deben dejar de tomar los medicamentos necesarios. Suspender el tratamiento no es una opción", conceptos que expuso en la revista AIDS.
Algunos factores de riesgo de la pérdida ósea, como la edad, no alcanzan a modificarse, aunque Bonjoch remarcó que existen estrategias para reducir el peligro o evitar que los problemas se agraven.
Las medidas favorables para personas con el virus de sida son: dejar de fumar, bajar el consumo de alcohol, hacer ejercicio, ingerir suficiente calcio y controlar el virus.
Es una afección que se acrecienta con el paso de la edad, especialmente desde los 50 años en adelante.
La Fundación Internacional de Osteoporosis dispone de los datos siguientes: una de cada tres mujeres mayores de 50 años sufrirá una fractura por osteoporosis.
La frecuencia de baja densidad ósea en la población general varía según las edades y el país, pero es de alrededor del 5 por ciento.
El VIH se confirma en el aumento de problemas óseos, aún sobre gente con menos de 42 años.
Evaluaciones anteriores sugirieron que el VIH ocasiona tres veces más la deficiencia ósea que en la población general.
Luego de analizar exámenes óseos de 671 pacientes con VIH, el equipo encontró que el 23 por ciento reunía osteoporosis y otro 48 por ciento, osteopenia.
De 105 participantes a los que se les efectuó más de un examen por imágenes y fueron controlados por lo menos cinco años, casi la mitad adoleció de un agravamiento del debilitamiento óseo hasta contraer osteopenia u osteoporosis.
Si bien las mujeres suelen poseer más peligro de pérdida ósea, en los hombres del estudio se duplicó. Otros factores asociados fueron: bajo peso, ser mayor y pasar más tiempo bajo tratamiento con tenofovir.
FUENTE: AIDS