Un fármaco barato y fácilmente administrable, que ayuda a controlar el sangrado excesivo, podría salvar la vida de 100.000 víctimas anuales de accidentes en todo el mundo, anunciaron científicos británicos.
Fueron estudiados 20.000 pacientes en 40 países y se constató que la medicación, una inyección llamada ácido tranexámico o TXA, redujo significativamente la mortalidad, lo que llevó a los especialistas a sugerir su uso rutinario como una buena herramienta de prevención.
El medicamento, un genérico sin patente fabricado por varias compañías que cuesta alrededor de 4,50 dólares por gramo, debería ser considerado "esencial" por la Organización Mundial de la Salud (OMS), dijeron los investigadores.
"Todos los médicos que tratan pacientes con trauma en el mundo deberían tener la opción de usar el ácido tranexámico", sostuvieron Ian Roberts y Haleema Shakur, de la London School of Hygiene and Tropical Medicine, cuya investigación se publicó en The Lancet..
En base a los resultados, el TXA podría salvar alrededor de 13.000 vidas por año en India y 12.000 en China. Esta cifra ascendería a 2.000 en Estados Unidos y a más en Europa.
Las lesiones son una importante causa de muerte en el mundo. Cada año, más de 1 millón de personas pierden su vida por heridas sufridas en la calle, en tanto, los accidentes de tránsito son el noveno motivo de muerte a nivel mundial.
Además de eso, las lesiones por apuñalamientos, tiroteos y minas terrestres provocan otros miles de fallecimientos, sobre todo de hombres jóvenes.
La hemorragia o sangrado excesivo es responsable de alrededor de un tercio de los decesos por trauma en hospitales y también puede producir fallas multiorgánicas.
"Cada año, alrededor de 600.000 pacientes heridos se desangran hasta morir en todo el mundo", agregó Roberts.
"Es importante recordar que los fallecimientos por heridas están creciendo a nivel mundial y que generalmente involucran a adultos jóvenes, que son los principales sostenes de hogar. El impacto en la familia es devastador", afirmó el profesional.
Más del 90 por ciento de las muertes por traumatismo ocurren en los países de ingresos medios y bajos, donde el acceso a los medicamentos a menudo está restringido por la deficiente infraestructura y los pocos recursos.
Dado que el TXA controla el sangrado, al reducir el quiebre de los coágulos, el equipo de Roberts piensa que es apropiado en los pacientes con hemorragia severa, tras haber descartado complicaciones como ataques cardíacos, accidentes cerebrovasculares y coágulos en los pulmones.
El gran ensayo involucró a 20.000 adultos gravemente heridos que sufrían un sangrado significativo, o estaban en riesgo de padecerlo, y se encontraban a pocas horas de haber sucedido el perjuicio.
Los pacientes recibieron un gramo de TXA a través de una inyección, seguido por otro gramo en gota a las ocho horas, o un placebo.
El equipo luego estudió la cantidad de muertes en el hospital a las cuatro semanas de la lesión y comprobó que el TXA bajó el peligro de muerte por sangrado excesivo en alrededor de un sexto, sin que se obtuviera un aumento de consecuencias insatisfactorias.
Etienne Krug, director de violencia, prevención de lesiones y discapacidad de la OMS, opinó que los resultados son importantes y pueden reducir el impacto de los accidentes y las heridas.
"Es fundamental que los médicos conozcan estas conclusiones y las tengan en cuenta en el tratamiento de emergencias”, destacó.