Serían hasta 65 millones por otro DNU que contrae deuda millonaria por operación financiera significativa contra el Estado
El Tesoro Nacional dará al BCRA bonos con tasas de hasta el 7,875 por ciento anual por Letras Intransferibles para luego ser entregados a bancos internacionales, muy atentos ellos en obtener inmediatos beneficios: HSBC, JP Morgan, Deutsche Bank, Citibank y Goldman Sachs.
En principio son 16.099 millones de dólares, aunque podrían sumar cerca de 65 mil millones. La medida aplicada por otro DNU aumenta considerablemente la carga de intereses y deuda argentina que atenta en demasía contra las arcas estatales.
Se convino un fuerte incremento de la tasa de interés y quita de capital del 15%. Los bonos por 13.697 millones de dólares y los servicios de deuda subirán con los nuevos papeles a 9141 millones de dólares de 4 a 11 años y se acabará absorbiendo deuda del sector privado.
Se benefician también los bancos locales, ansiosos de volver a la década de los 90´con emisiones de títulos, reestructuración financiera, préstamos con garantías y comisiones elevadas, más la especulación con bonos de deuda pública.
En menos de un mes, el BCRA vuelve a satisfacer los intereses históricos de los banqueros. De un megacanje de otros 48.387 millones de dólares, se alcanzarán finalmente 64.486 millones de dólares, tras un acuerdo entre el ministerio de Hacienda y el Banco Central.
La operación financiera es la siguiente: se truecan dos Letras Intransferibles recibidas por el Banco Central en 2006 y 2010 por tres Bonar que vencen en 2022,2025 y 2027.
Los nuevos bonos serán entregados en garantía a los grandes bancos internacionales por un préstamo al BCRA de 5000 a 10.000 millones de dólares.
Por un lado se da una quita del 15% en el capital, pero la tasa de interés se va a 7,75 y 7,875 por ciento anual; queda entonces con una desventaja onerosa el Tesoro nacional.
En caso de que el BCRA no devuelva el crédito- según el DNU- los bonos pasan a las entidades prestatarias con cobro de capital total e intereses. En tanto, la negociación para condiciones de repago del crédito, incluye un ajuste fiscal tal cual se vivió en los noventa.
El hecho de que intervengan bancos internacionales, significa la incorporación de un actor privado que tiene el objetivo de lograr la máxima ganancia con comisiones y tasas de interés.
El costo de la deuda pública. Con el Bonar 2022, la deuda del presupuesto nacional será de 337 millones de dólares por año en cada uno de los próximos seis. En total, 2024 millones de dólares.
Con el Bonar 2025, 3134 millones en nueve años, y con el Bonar 2027, 3983 millones en 11 años.
Este endeudamiento público debilita la solvencia del Estado con el argumento de Hacienda de elevar la calidad patrimonial del Banco Central. Cuanto más elevado es el monto a desembolsar por los servicios de la deuda, más importante debe ser el ajuste fiscal.
Si se completa el total de 65 mil millones de dólares en iguales condiciones de quita de capital, tasas y plazos, los servicios de deuda adicionales en casi nueve años sumarían 36.638 millones de dólares. Una carga inmensa sobre el presupuesto nacional con la excusa de mejorar la calidad del balance del Banco Central, cuando es una operación financiera de incremento de la carga de los servicios de la deuda pública.
En tanto, el BCRA sigue apuntando a un dólar flotante y a promover en la población ahorro en pesos.