MUTILACIÓN GENITAL FEMENINA: GRAVES EFECTOS PSICOLÓGICOS SEMEJANTES A ABUSO SEXUAL
Las menores de edad sometidas a una mutilación genital se ven expuestas durante toda su vida a graves complicaciones físicas y a un alto riesgo de sufrir dificultades psicológicas, todas ellas comparables a las consecuencias de un abuso sexual.
Depresión, estrés postraumático, desórdenes mentales, ansiedad
Los inconvenientes psicológicos a largo plazo, que abarcan depresión, estrés postraumático, desórdenes mentales y ansiedad, han sido constatados por varias investigaciones, asimilándolos a las perturbaciones de chicas sometidas sexualmente.
Trauma y violencia, clítoris
La mutilación provoca dolor y, a la vez, fuerza y violencia contenidas al verse las menores quietas en el transcurso de la ablación, lo cual provoca invariablemente un trauma, muchas veces irrevocable.
Sobre todo, el trauma queda a raíz de que las mujeres son privadas de por vida del clítoris: el órgano más sensible de su cuerpo.
En qué consiste la ablación
Comprende todos los procedimientos quirúrgicos orientados a la extirpación total o parcial de los genitales externos, tanto por razones terapéuticas como culturales.
Riesgos en la salud que inducen a la operación
Muchas chicas padecen hemorragias e infecciones que las conduce a la muerte, por las cuales se recurre a la mutilación genital.
Escisión o extirpación de clítoris y cierre vaginal
La más común de las mutilaciones es la escisión del clítoris y los labios menores (un 80 % de los casos); la más severa (15%) es la infibulación, que significa la extirpación del clítoris, los labios menores y parte de los mayores junto con el cierre vaginal con sutura.
Daño de por vida: infertilidad, infecciones crónicas, embarazo y parto
Estas mutilaciones con el transcurso de los años, crean infertilidad, infecciones crónicas, relaciones sexuales dolorosas, y son causa de entorpecimientos en el embarazo y el parto que perjudican a las mamás y a los recién nacidos.
Disminución de deseo sexual y placer
Asimismo, predominan el dolor en el intercambio sexual y las bajas del deseo y del placer.
Hemorragias luego del parto
De acuerdo a investigaciones aún no publicadas, el 21% de las mujeres con ablación de clítoris y labios –sin sutura de vagina- sobrellevan hemorragias luego del parto, de las cuales de un 15 a un 98% precisan internación hospitalaria.
· Muerte de los niños al nacer
La ablación ocasiona el riesgo de que nazcan bebés con problemas o muertos; el fallecimiento se da en una proporción de 1 a 2 pequeños de cada cien madres mutiladas en su niñez.
Más perjuicios: Sida y hepatitis
Asimismo, estadísticas clínicas han demostrado que esta mutilación provoca otras desventajas: el contagio del VIH-sida, o la hepatitis.
Promoción por parte de líderes religiosos
"En Egipto, Sudán y Mali grupos religiosos están promoviendo la ablación y califican a los opositores de “neocolonizadores", una tendencia peligrosa que se esta expandiendo por la primacía de rituales.
Las prácticas son frecuentes en menores que van de cuatro a doce años de edad.
Algunos países lo hacen pronto para que las niñas no recuerden el dolor que genera, aunque en otros la práctica se realiza cuando son más maduras porque consideran que ellas se disponen mejor a asumir .el sufrimiento.
El dolor es un objetivo
Las costumbres de este tipo en las mencionadas naciones se deben a que el dolor es un objetivo: prepara al sexo femenino para toda su vida y para que queden inscriptos en la memoria de su cuerpo los “conflictos” que se asocian a la sexualidad; esperan así que las mujeres resistan mejor las tentaciones sexuales.
Ocho mil víctimas por día en el mundo
Se calcula que en el mundo hay entre 100 y 140 millones de mujeres mutiladas.
Cada año se suman tres millones de víctimas mundialmente, entre niñas y adultas, lo que significa ocho mil por día.
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Fuente: doctora Elise Johansen, del departamento de Salud Reproductiva de la Organización Mundial de la Salud (OMS)
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