Perjuicios físicos y psíquicos, nerviosismo, ansiedad
El mal humor atenta contra el bienestar general de la salud provocando perjuicios graves y/o ciertos tipos de trastornos físicos y psíquicos, que en este último caso requieren de atención psiquiátrica, dado que sus consecuencias impiden el buen desempeño y relaciones apropiadas en el ámbito social, familiar y laboral, una causa que también origina nerviosismo y ansiedad desmedidos.
El corazón se ve muy afectado
Si los enojos no se controlan y/o evitan son una fuente de lesiones importantes en el corazón: aumentan el ritmo cardíaco, la presión arterial y el flujo sanguíneo, crea taquicardia y las personas es posible que padezcan un infarto hasta llegar a su deceso.
Piel, diabetes, riñones y estómago
Además, se presentan inconvenientes en la piel, tales como enrojecimiento y pruritos, mientras que en los diabéticos es factible un alto descontrol de la glucosa con fuertes daños en los riñones y estómago.
La gente que está siempre de mal humor necesita asistencia clínica y una evaluación psiquiátrica, concluye una investigación que llevaron a cabo recientemente expertos del Instituto Mexicano de Seguridad Social.